Como corresponde a una buena crisis, todo se vuelve caótico y desconcertante. Y yo lo reconozco, estoy desconcertado. Sobre todo ante algunas respuestas que se están dando desde diferentes instituciones y administraciones a los problemas que esta crisis ha generado.
Es desesperante. No pasa un sólo día en que no tengamos alguna noticia sobre que un Ayuntamiento, una Comunidad Autónoma o alguna otra institución ha aprobado alguna medida o Plan para solucionar, abordar o paliar algún efecto de la crisis. Que si escolares que pasan hambre, que si familias desahuciadas...
Al principio, tengo que reconocer que me interesaban esas iniciativas. Algunas me parecían hasta interesantes. Ya no. Me da una pereza mortal. Os diré por que.
En primer lugar, porque en el 99 % de las ocasiones no son sino meras medidas asistencialistas, que lejos de abordar las causas de los problemas se dedican a paliar los efectos que esos problemas causan.
En segundo lugar, porque suelen estar propuestas con toda pompa y boato, a la mayor gloria de la institución que la propone, quien deja bien claro:
a) que ha descubierto la piedra filosofal de la acción social y
b) que es más solidario, bueno, moderno y eficaz que nadie
Tercero, porque en otro gran porcentaje son propuestas por administraciones o posturas políticas que al mismo tiempo mantienen las estructuras y causas de la crisis. En una postura cínica donde las haya ejecutan políticas contradictorias. Siguiendo la metáfora clásica diríamos que los mismos que expulsan a la gente del tren se dedican a recoger a algunos para subirlos de nuevo y poder echarlos. Lo del Plan contra la Pobreza Infantil del Ministerio de Servicios Sociales no tiene calificativos.
Cuarto, porque jamás son propuestas estructurales. Son ocurrencias, propuestas puntuales, presupuestos sacados de aquí y allá, que probablemente no tengan continuidad y que cuando no puedan disponerse de ellos se eliminarán utilizando la más sucia propaganda para decir que ya no hacen falta.
Quinto. Porque si de verdad quisieran hacer algo para la gente que peor lo están pasando aprobarían medidas coordinadas, consensuadas incluso a nivel nacional (sí, nacional). Porque se reforzarían las estructuras y sistemas (por ejemplo el de Servicios Sociales) para que pudieran cumplir su función. Porque se aprobarían leyes como la de Renta Básica u otras donde se garantizara el derecho a la vivienda o al trabajo.
Pues eso. No se si será el comienzo del verano, pero todas estas medidas me dan una pereza...
Pues eso. No se si será el comienzo del verano, pero todas estas medidas me dan una pereza...
Que no nos dé pereza.
ResponderEliminarDenunciemos sin descanso, como hace Pedro, esas medidas " caritativas" de los causantes de la miseria.Exijamos el refuerzo del Sistema Público de Servicios Sociales!!!