martes, 12 de noviembre de 2013

XII Congreso de Trabajo Social

¿Recordáis esa sensación que teníamos cuando éramos niños y en septiembre volvíamos a la Escuela? Pues me he reencontrado con ella mientras preparaba la maleta para irme al XII Congreso Estatal de Trabajo Social.



El primer día era una mezcla de incertidumbre e ilusión. Ganas de reencontrar a los amigos, dudas con los contenidos y las asignaturas, y en general, la certeza de que se abría una nueva etapa. De nuevo.

Como os digo, me voy al Congreso con muchas de esas sensaciones. Ganas de encontrar a colegas y amigos, unos nuevos y otros viejos, y deseando oir sus aportaciones, ideas, experiencias... Encontrarnos y aprender. Se abre otra etapa.

Algunos de estos amigos se harán por fin tridimensionales, como los de la Blogostsfera, después de muchos meses de relación a través de las pantallas y los medios digitales. O con otros con los que intercambiamos avatares y reflexiones a través de Facebook, Twitter, u otros medios.

Soy consciente de que un Congreso de este nivel, a pesar de sus límites institucionales, es sobre todo una oportunidad. Una oportunidad para la profesión, que sin duda crecerá y saldrá más fortalecida en unos "tiempos de malestares" en los que está más amenazada y es más necesaria que nunca.

Y una oportunidad para cada uno de nosotros y nosotras. Que seguro que venimos con las pilas cargadas para afrontar los retos cotidianos que nos esperan en la construcción del proyecto que compartimos como profesión.

Porque hoy más que nunca son tiempos en los que juntarse, compartir y luchar unidos. Debatir, consensuar, establecer estrategias..., superando nuestras pequeñas o grandes diferencias. Porque no son tiempos para francotiradores, ni para hacer la guerra cada uno por su cuenta.

Por mi parte aportaré lo que pueda, desde mi condición de asistente, para que este Congreso consiga los objetivos que pretende. Sé que mucha gente, del Consejo General, del Colegio de Málaga y de otros Colegios y lugares de España ha currado mucho para hacer realidad este Congreso.

Ahora, vamos a aprovecharlo. Como aprovechábamos el tiempo cuando éramos niños y, con nuestros cuadernos y lápices nuevos, corríamos ilusionados a la Escuela a jugar, a aprender, a soñar y a crecer.

Nos vemos en Marbella.



1 comentario:

Gracias por comentar.